Todos amamos mimar a nuestros fieles compañeros caninos y en ocasiones, nos sentimos tentados a compartir con ellos algunas golosinas para perros. Sin embargo, ¿qué tan cierto es que todas los bocadillos o snacks son seguros para nuestros engreídos?
A lo largo de los años, circulan numerosos mitos y verdades en torno a lo que nuestros amigos peludos pueden o no consumir. Mientras que algunos alimentos que consideramos inofensivos pueden ser tóxicos para ellos, otros que podríamos descartar resultan ser seguros y hasta beneficiosos.
En este texto proporcionaremos una guía clara sobre los bocadillos que puedes compartir con tu mejor amigo y aquellos que deberías evitar a toda costa.
Prepárate para adentrarte en un mundo de descubrimientos que te ayudarán a cuidar aún más la salud y el bienestar de tu compañero de cuatro patas.
Mimar a nuestros perros con golosinas es un acto de cariño que muchos padres de mascota disfrutan, pero es esencial saber qué y cuánto ofrecerles para mantener su salud óptima.
Las golosinas para perros pueden ser una excelente herramienta para el entrenamiento, el refuerzo positivo y fortalecer nuestro vínculo con ellos. Sin embargo, hay algunas consideraciones a tener en cuenta.
Primero, es fundamental que las golosinas sean específicas para perros y no alimentos destinados al consumo humano. Muchos de nuestros alimentos, como el chocolate, los aguacates o las uvas, pueden ser tóxicos para ellos.
Segundo, las golosinas deben darse con moderación. Aunque puede ser tentador ceder a esos ojos suplicantes, hay que recordar que las golosinas adicionales pueden llevar a problemas de peso y otros inconvenientes de salud. Se recomienda que las golosinas no constituyan más del 10% de la ingesta diaria total de un perro.
Por último, es esencial leer los ingredientes. Al igual que con los alimentos para humanos, es mejor optar por golosinas naturales y sin aditivos artificiales.
Mientras se elijan golosinas adecuadas y se ofrezcan con prudencia, pueden ser una adición beneficiosa a la dieta de tu perro. No obstante, siempre es recomendable consultar con tu médico veterinario de confianza para obtener el mejor consejo sobre la alimentación de tu mascota.
El mundo de las golosinas para perros es tan vasto y variado como el de los humanos. Estas delicias caninas están diseñadas no solo para satisfacer el paladar de nuestros engreídos, sino también para atender sus necesidades nutricionales y de salud. A continuación, presentamos algunos tipos populares:
Golosinas Blandas: Estas son tiernas, fáciles de masticar y suelen ser la elección predilecta para el entrenamiento debido a su textura y sabor.
Galletas y Biscuits: De textura más crujiente, estas golosinas ayudan en la limpieza dental y vienen en una variedad de sabores, desde pollo hasta verduras.
Huesos Masticables: Fabricados a menudo de cuero crudo o ingredientes naturales, estos huesos ayudan a reducir el sarro y promover la salud dental.
Sticks Dentales: Diseñados específicamente para la higiene oral, estos palitos suelen tener formas y texturas que fomentan la masticación y limpieza entre los dientes.
Golosinas Funcionales: Enriquecidas con ingredientes beneficiosos como glucosamina para las articulaciones o ácidos grasos omega-3 para la piel y el pelaje.
Snacks Naturales: Como tiras de pechuga de pollo deshidratada o pescado, estas golosinas son una fuente pura y simple de proteína.
Es vital leer las etiquetas y escoger golosinas adecuadas al tamaño, edad y necesidades nutricionales de tu perro. Como siempre, se deben ofrecer con moderación y como un complemento, no un sustituto, a su dieta regular.
Las golosinas para perros, cuando se usan adecuadamente, pueden ser más que simples premios sabrosos; se convierten en herramientas útiles en diversas situaciones. Veamos las ocasiones más propicias para ofrecer estos bocados a nuestros amigos caninos:
Las golosinas son una forma efectiva de recompensar comportamientos deseables durante las sesiones de entrenamiento. Ayudan a reforzar la conducta positiva y a establecer una asociación favorable entre el perro y la acción realizada.
Al recompensar acciones específicas, como hacer sus necesidades en el lugar correcto o responder a una orden, se promueve que el perro repita esos comportamientos.
Cuando se introduce un perro a nuevos entornos, personas o animales, las golosinas pueden ayudar a crear experiencias positivas, reduciendo el estrés y la ansiedad.
Durante juegos como “buscar” o actividades de agilidad, las golosinas pueden ser un incentivo para la participación y el esfuerzo del perro.
Al acostumbrar a un perro a que le cepillen el pelo, le corten las uñas o le administren medicamentos, una golosina puede hacer que el proceso sea más placentero.
Como en el caso de los humanos, ocasionalmente es agradable celebrar con una golosina, ya sea su cumpleaños, un día festivo o simplemente un momento de cariño compartido.
Aunque estas ocasiones son ideales para premiar a tu mascota, siempre es fundamental recordar la moderación y asegurarse de que las golosinas no interfieran con su dieta regular y equilibrada.
Todos hemos caído alguna vez en la tentación de compartir nuestros bocadillos con nuestras mascotas, especialmente cuando nos observan con ojos suplicantes. Sin embargo, es vital tener en cuenta algunas precauciones para garantizar la salud y bienestar de nuestro engreído:
Toxicidad: Algunos alimentos seguros para los humanos son tóxicos para las mascotas. Chocolate, uvas, pasas, cebolla, ajo y aguacates son solo algunos ejemplos que pueden causar problemas graves en nuestros amigos peludos.
Control de Porciones: Incluso si el bocadillo es seguro, es esencial moderar la cantidad. Un pequeño trozo para nosotros puede representar una gran porción para una mascota pequeña, lo que podría llevar a un aumento de peso.
Condimentos y Especias: Algunos condimentos y especias pueden ser irritantes o dañinos para las mascotas. Siempre es mejor ofrecer alimentos sin aditivos ni condimentos.
Huesos y Semillas: Evita compartir alimentos que contengan huesos pequeños o semillas, ya que pueden causar asfixia o lesiones internas.
Alimentos Altos en Grasa: Estos pueden provocar pancreatitis en algunos animales, una afección dolorosa y potencialmente grave.
Consultar al Veterinario: Si tienes dudas sobre un bocadillo específico, consulta con un profesional. Mantener una lista de alimentos seguros e inseguros puede ser útil.
Recuerda que las golosinas y bocadillos deben ser un complemento, no un sustituto, de una dieta equilibrada. Protege a tu engreído evitando compartir alimentos sin estar seguro de sus ingredientes y calidad.
Referencias:
Canal Hogar (2021). Golosinas para perros ¿cuáles, cómo y cuántas? MAPFRE. Recuperado de: https://www.hogar.mapfre.es/mascotas/perros/golosinas-para-perros-cuales-como-y-cuantas/#:~:text=Los%20alimentos%20naturales%20y%20especialmente,programas%20de%20entrenamiento%20o%20educaci%C3%B3n.
El País (2019). 15 ‘snacks’, golosinas y premios para tu mascota. El País. Recuperado de: https://elpais.com/elpais/2019/07/24/escaparate/1563992686_212220.html
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